Índice

Psicoauditación - Esaú

Grupo Elron
Sección Psicointegración y Psicoauditación - Índice de la sección - Explicación y guía de lectura de la sección

Si bien la Psicoauditación es la técnica más idónea para erradicar los engramas conceptuales del Thetán o Yo Superior de la persona, la mayoría de las veces se psicoaudita a thetanes que habitan en planos del Error y sus palabras pueden no ser amigables y/o oportunas para ser tomadas como Mensajes de orientación, algo que sí se da cuando se canaliza a Espíritus de Luz o Espíritus Maestros.
El hecho de publicar estas Psicoauditaciones (con autorización expresa de los consultantes) es simplemente para que todos puedan tener acceso a las mismas y constatar los condicionamientos que producen los implantes engrámicos.
Gracias a Dios, esos implantes son desactivados totalmente con dicha técnica.


Atte: prof. Jorge Olguín.

 

 

Sesión 06/01/2014
Médium: Jorge Raúl Olguín
Interlocutor: Karina
Entidad que se presentó a dialogar: Thetán de Esaú.

En un saqueo a su aldea perdió su padre y todas sus pertenencias. En este momento el rencor y la venganza toman al ser que se pregunta acerca de la justicia divina, del porqué de todo ello. Los engramas aparecen entonces. Notó la soledad aun acompañado de amigos.

Sesión en MP3 (2.416 KB)

 

Interlocutor: Bienvenido.

 

Entidad: Muchas gracias.

 

Interlocutor: ¿Cómo te encuentras?

 

Entidad: Recordando distintas vivencias de distintas épocas, siglos y siglos en otro mundo. También tenía el nombre de Esaú y me encontraba cabalgando con otros cinco compañeros atravesando el casi interminable brazo, un brazo que separaba dos continentes.

 

Interlocutor: ¿Sucedió algo en particular en esa encarnación?

 

Entidad: Muchas injusticias. Muchos Maestros dicen que a veces se aprende más de las injusticias.

 

Interlocutor: ¿Te han quedado engramas de esa vida?

 

Entidad: Muchos.

 

Interlocutor: Coméntame.

 

Entidad: Se aprende más de las desdichas de otros, de las frustraciones de otros que a veces de las propias. A veces sin protagonizar determinado episodio puedes ver cómo los proyectos, los planes de un compañero se frustran y tú sumas su experiencia dolorosa a la tuya.

En el continente donde íbamos había un rey muy despótico, un rey que muchos amaneceres atrás había asolado varias aldeas de donde veníamos, de Krakoa.

Recuerdo que cada uno de mis compañeros era distinto al otro. Gualterio, con sus rencores, era quizá en el que más reparaba. Había sufrido pérdidas, tenía muchas inseguridades, muchas dudas de saber cuál era su origen.

En mi caso era huérfano, me crié prácticamente sin padres. Estaba con un carpintero al que amaba como si fuera un verdadero padre y en uno de los saqueos a nuestra aldea una flecha en su cuello acabó con su vida y con mi dicha.

La idea suya era que cuando él se fuera con aquel que está más allá de las estrellas como no tenía familiares me dejaba a mí su carpintería. Quedó todo reducido a cenizas. O sea, me quedé sin nada pero dentro mío guardaba su recuerdo.

Mi pregunta para ti es: ¿Por qué lo que enseñaron los ancianos no se cumple? Los ancianos sabios de la aldea decían que cuando tú haces las cosas bien -a pesar de mi corta edad- aquel que está más allá de las estrellas te premia. No he visto ningún premio. He visto muerte alrededor mío, fracasos. Me quedé solamente con una cabalgadura.

 

Interlocutor: Es que en realidad hay situaciones que dependen de nosotros y otras que no dependen de nosotros. Las que dependen de nosotros, en esas nosotros somos responsables de nuestros actos y si nuestros actos son honestos y coherentes sus consecuencias van a ser positivas. Pero en aquellos actos que no dependen de nosotros no tenemos responsabilidad, lo que sí podemos sacar de ellos es algún tipo de aprendizaje.

 

Entidad: Ahora tú dime: entonces aquel que está más allá de las estrellas, ¿es indiferente a lo que nos pasa porque dependemos de nuestras acciones? En este caso, ¿somos responsables o dependemos de acciones de terceros que pueden estar a favor o en contra nuestra? En ese caso, aquel que está más allá de las estrellas, ¿cuál es su rol? ¿En qué nos protege? ¿En qué nos premia? ¿En qué nos castiga?

 

Interlocutor: Es que, como tú dices, el que está más allá de las estrellas no es indiferente. Simplemente que nosotros como seres encarnados o tú como thetán podemos verlo desde un punto de vista humano. Él está dentro de cada uno de nosotros, somos como haces de su Luz y a medida que vamos avanzando nuestra evolución espiritual vamos comprendiendo o acercándonos a la comprensión de Dios. Nosotros, a veces, no podemos comprender que una situación dolorosa pueda llegar a ser para nuestro fortalecimiento espiritual.

 

Entidad: Está bien lo que tú dices. Sucede que en un mundo tan peligroso tú buscas otro tipo de necesidades quizá.

 

Interlocutor: No es tan así.

 

Entidad: Necesitas el poder como para poder subsistir y poder sobrevivir, como para imponerte a los demás. Sé que hay personas que tienen otro tipo de búsquedas en temas que no son materiales pero son segregados, son dejados de lado, viven solos en las montañas. A algunos los consultan porque dicen que tienen una gran sabiduría, otros los persiguen. Cuando tú vives en una región hostil lo que buscas es el poder, el ser un buen guerrero, el tener las armas como para imponerte.

 

Interlocutor: Digamos que es tu punto de vista, no todos buscan ese tipo de poder o no todos buscan el poder. Personalmente creo que el mayor poder que puede tener un ser es el poder de amar y el poder comprender, ese poder de comprensión, ese poder de, yendo un poco más allá, iluminación.

 

Entidad: Si yo retrocedo a cuando ocurrió ese gran saqueo y me encuentro con una aldea incendiada corro hacia la carpintería y solamente quedaban restos de la misma y me encuentro a ese ser que me ha acogido de niño y sus ojos abiertos, sin vida, una flecha atravesando su cuello. ¡Qué voy a pensar en ese momento en amor, en esa profundidad interna que tú dices! En ese momento hubiera querido ser el jefe de un ejército y vengarme de aquellos que saquearon la aldea. Quizá tú me veas como un ser para nada espiritual como tú dices pero...

 

Interlocutor: No estoy aquí para prejuzgarte, estoy aquí para ayudarte.

 

Entidad: Tuve engramas de perder un lugar de pertenencia, pérdidas de seres queridos, dudas con respecto al futuro cabalgando con compañeros que hasta poco tiempo atrás no los conocía, hurgando pero no por nada, simplemente para comprender la vida de cada uno de ellos. Como dije antes, con Gualterio, con el que más afinidad tenía, él también había tenido pérdidas y también tenía sus sentimientos de venganza, a veces la sensación de soledad.

 

Interlocutor: Y dime, ¿la venganza te ha llevado algo positivo?

 

Entidad: En ese momento en que íbamos cabalgando por el brazo un itsmo pequeño angosto pero interminable en cuanto a longitud era el motor que me movía. Hasta que a muy pocas líneas de llegar al continente había una crecida y el brazo terminaba y era imposible llegar al otro lado. En un lugar tan pequeño en cuanto a lo ancho era muy difícil conseguir madera para construir una balsa. Estuvimos amaneceres y amaneceres juntando pequeños maderos. Si hubiéramos estado en una llanura en dos amaneceres la hubiéramos armado esa balsa. Hasta que finalmente lo logramos.

Nosotros amábamos a nuestras cabalgaduras pero no cabían en la balsa que habíamos improvisado y las sujetábamos con una correa del cuello e iban nadando fuera de la balsa y las sujetábamos del cuello. Tuvimos la fortuna de que hubo grandes vientos y pudimos llegar a la orilla. Y allí nos esperaba una nueva aventura porque había seres que no conocíamos, animales peligrosos pero nuestra idea era seguir avanzando.

Algunos de mis compañeros querían establecerse en un lugar y estar tranquilos. Muchas veces hablamos de separarnos y no cada uno seguir por su camino pero tres de nosotros sabíamos lo que queríamos, los otros tres es como que uno quería seguir por su cuenta y dos querían establecerse en un lugar. Finalmente seguimos avanzando. La última pregunta en esta comunicación es la siguiente.

 

Interlocutor: ¿Dime?

 

Entidad: Cuando todo lo conocido lo has dejado atrás, cuando tu futuro es incierto porque estás en un lugar nuevo porque no sabes con qué te vas a encontrar, a qué te vas a enfrentar, cuando no sabes cómo seguir, qué actitud tener y no terminas de conocer a la gente que te acompaña, ¿qué haces? ¿Cómo sigues? ¿Qué decisiones tomas?

 

Interlocutor: Hay que ver el momento a momento, hay que decidir paso a paso. Esta es la vida, no podemos cuestionarnos todo lo que va a suceder mañana, simplemente debemos... No está mal programar pero las decisiones y los pasos se dan en el aquí y en el ahora, por lo tanto hay que evaluar situación por situación tratando de actuar a conciencia, lo que significa sin ser reactivos e impulsivos y tratar de decidir lo mejor no solamente para uno sino también para los que nos rodean siendo responsables de nuestros actos.

 

Entidad: Mira, es muy breve esto. Este carpintero que me ha criado dijo que cuando él era pequeño antes de que yo naciera, mucho antes, había conocido a un gran guerrero que era bueno porque si bien él había matado gente era en defensa de otras aldeas y él planificaba con muchos amaneceres de anticipación tácticas, estrategias. Entonces, no es que planificaba el momento a momento y tuvo buen resultado hasta su muerte. Entonces...

 

Interlocutor: Así trabajan los estrategas...

 

Entidad: Claro, pero tú me dices que cada amanecer lo vaya planificando momento a momento.

 

Interlocutor: Quiero decir que uno puede tener planes en la vida pero a veces hay situaciones ajenas a nosotros que hacen que debamos tomar en ese momento, quizás, algún tipo de camino alterno al que teníamos planificado, un efecto sorpresa podríamos llamarlo así. Y decidir en base a esto que sucede en ese momento que no estaba premeditado, que no estaba en nuestros planes por así decirlo.

 

Entidad: Entiendo, entiendo.

 

Interlocutor: Fíjate que lo bueno es que siempre tenemos alternativas, siempre hay una alternativa.

 

Entidad: A veces nuestras vivencias es como que nos muestran diez salidas y en el momento de elegir todas se cierran. Y es angustiante, doloroso, asfixiante. Y no sabes, no entiendes y en ese momento te quedas sentado, inactivo pero también sabes que eso no te sirve porque te marchitas, te aniquilas a ti mismo.

 

Interlocutor: A veces esas puertas o salidas, como le llamas tú, que se cierran son avisos, señales pero siempre, siempre vamos a encontrar una salida. Gracias por estar aquí.

 

Entidad: Gracias a ti por haberme, de alguna manera, mostrado lo que tengo que hacer. Hasta todo momento.

 

Interlocutor: Un abrazo de Luz. Hasta todo momento.